Pero la muerte se suicida si me hipnotizas con tus pupilas. Gritame con los ojos,que se van a humedecer de felicidad.

jueves, 18 de julio de 2013

De las dudas infinitas


- Anda cariño, ven a la cama, nunca molestas.

No quise hacerme mucho de rogar, por si no insistía, ¿sabéis? Si hubiese dejado de insistir me habría sentido mil veces peor. Así que me levanté y le seguí hasta el dormitorio.
Y esta vez sí, al volvernos a acostar, cada uno por un lado, se tumbó muy cerca de mí, me besó la nuca, me abrazó por la cintura.
Y me dormí. Me dormí con la luz tenue y la radio bajita, bajita. Me dormí pensando en qué he hecho yo para merecer un hombre tan bueno. Me dormí con una determinación: vale la pena, y no pienso dejarle escapar. Si tenía alguna duda de querer pasar mi vida a su lado, allá dónde él estuviese, la hizo desaparecer.
Fue un sueño tranquilo, a su lado casi nunca tengo pesadillas.

No hay comentarios:

Publicar un comentario